Me había perdido, pero logré encontrarme.

Nunca pensé que me iba a perder yo misma. Sin reconocerme, sin saber dónde estaba parada. Los días transcurrían, y no sabía dónde estaba. Me sentía en otra dimensión. No me importaba nada, o mejor dicho me importaban cosas que no debían importarme, y lo que de verdad me tenía que importar no lo hacía. Iba sin ganas a todos los lugares, y ni podía poner una sonrisa falsa. Me preguntaban que me pasaba, y ni sabía que responder, les decía "nada", pero ellos como yo, sabíamos que me pasaba algo, pero sinceramente ni yo podía identificar que me pasaba. En un momento mire a mis compañeros y le dije "me siento en otro espacio, en otra dimensión, no estoy parada acá en el presente, no sé, es medio confuso", mi amiga me dijo, te entiendo, me pasa a veces. No sé si realmente sintió lo que sentía yo en ese momento. Era un extraterrestre o alguien invisible, que no le importaba lo que hiciera, total no lo iban a ver. Me tomé unos días para ver que me pasaba. Logré descifrarlo, me costó mucho, pero entendí la razón. No valoraba nada, ni me valoraba yo. Podría dar consejos de valorarse, de respetarse, de sentirse uno seguro, pero nada de eso yo lo utilizaba. Decía, hablaba, pero dónde accionaba yo con todas esas cosas. Me pasaban por encima, se reían de mi, hablaban a mis espaldas, lo único que yo hacía respecto a eso, miraba, me entristecía que hagan eso, pero nada más. ME FALTABA ACCIONAR. Finalmente una persona me hizo dar cuenta todo lo que me pasaba, no valoraba un carajo lo que tenia. Ese día hice algo que nunca pensé hacer, afrontar todo, todo lo que temía decir, o hacer. No me importaron las consecuencias lo debía hacer. Me ayudo mucho, hasta el día de hoy, doy gracias de haber hecho las cosas que hice, no me arrepiento de nada, porque me hizo abrir los ojos. Agradezco la valentía que tuve para afrontar cosas, en vez de deprimirme, encerrarme y hacer de nuevo las mismas cosas que hacía. No voy a mentir, estuve por bajar los brazos y tirar todo a la mierda, pero no lo hice, no me rendí. Por primera vez me siento orgullosa de cosas que hice anteriormente , y esto último que hice, por haberme animado. Doy gracias a las personas que estuvieron y están a mi lado, pasé lo que pasé. ¡Gracias!